Consideraciones sobre el asma
El asma bronquial es la enfermedad crónica más frecuente en la infancia. Se ha constatado en las últimas décadas un incremento de su prevalencia a nivel mundial.
Hoy en día, se sabe que el asma puede ser alérgico, por ende es muy importante detectar por medio de pruebas cutáneas a qué aeroalérgeno está sensibilizado el paciente y es obligación del médico tratante de dar claras pautas al respecto de los posibles desencadenantes de síntomas y crisis asmáticas.
Las mascotas y los pacientes asmáticos
¿Qué hacemos cuando las pruebas cutáneas son positivas para alguna mascota que tenemos en el hogar?
Los animales más frecuentes son el perro y el gato, aunque cada vez vemos más alergia a pequeños animales como hámster, cobayo o hurón.
La caspa de los animales es la responsable principal de la alergia a animales. Los animales, igual que las personas, van renovando su piel, ésta se va desprendiendo poco a poco, en escamas microscópicas.
Esas escamas se quedan flotando en el aire, y las personas las respiran, con lo cual pueden sufrir síntomas de alergia. El pelo también puede causar alergia, pero menos frecuentemente, ya que el pelo se suele quedar en el suelo y no pasa al aire.
Otras sustancias que dan alergia se pueden encontrar en la saliva de los animales, en las lágrimas, en la orina, o en el suero.
Siempre teniendo en cuenta la severidad del paciente, se indicará el tratamiento farmacológico correspondiente, inmunoterapia con los alérgenos detectados si corresponde y control de los factores ambientales.
Ante todo hay que escuchar al paciente, si bien la principal recomendación es no tener mascotas en el hogar, la mayoría ni piensa en esa opción. En esas familias es importante dar claros consejos para transcurrir la enfermedad lo mejor posible y evitar complicaciones.
Pautas a seguir en el hogar
Las siguientes pautas, se pueden aplicar a todo paciente asmático alérgico que tiene mascotas en su hogar
- No permita que la mascota entre en la habitación del alérgico, y mucho menos que duerma allí. En lo posible establecer la habitación donde el alérgico pasa la mayor cantidad de horas como “Libre de mascotas”
- Ventilar los ambientes a menudo
- El alérgico debe tocar a la mascota lo menos posible y lavarse las manos luego de hacerlo. Es importante que los niños alérgicos, una vez que estén bañados y con la ropa de cama puesta, ya no toquen ni jueguen con la mascota
- Pase la aspiradora y quite el polvo con regularidad, y evite las alfombras y los muebles que atraen la caspa
- Lavar y cepillar a la mascota con frecuencia
- Si tienen un gato, en lo posible que el alérgico no sea quien manipule el cajón de los excrementos
- Que todos los miembros de la familia se laven las manos después de jugar con la mascota
- Considere la posibilidad de comprar un purificador de aire de partículas de alta eficiencia (filtro HEPA) para la habitación del alérgico. Los sistemas de filtración central también son una opción, pero son mucho más
caros - Mantén a tu mascota afuera. Si tu mascota puede vivir cómodamente afuera, puedes
reducir la cantidad de alérgenos en la casa
Es importante que los pacientes alérgicos sepan que los síntomas los pueden presentar al visitar a algún amigo o familiar que tenga mascotas, aunque sea breve el tiempo que permanezca en esa casa. Muchos niños suelen ir a dormir a casas de sus amigos, si ellos tienen mascotas a las que son alérgicos, en muchas oportunidades requieren premedicación ya sea con antihistamínicos o salbutamol para evitar los síntomas.
Es importante realizar controles periódicos con tu médico de cabecera para monitorear tu tratamiento y asegurarse que tu enfermedad esté controlada.
Acerca del autor
Especialista en Alergia e Inmunología