Fundación para el estudio del asma y otras enfermedades alérgicas

Fundaler - Fundación para el Estudio del Asma y otras Enfermedades Alérgicas

La alergia y Ud.

¿Qué tienen en común aquella persona que estornuda cuando busca una frazada guardada en el placard, con aquella otra que se rasca desesperadamente y se le llena la piel de ronchas luego de haber comido frutillas, con aquella otra que se levanta en horas de la madrugada con el pecho oprimido, ahogado, con una crisis de asma desencadenada ese día que cambió el tiempo, o con aquel otro que ve su rostro hinchado con sus párpados, labios y articulaciones doloridas y picándole, luego de haber tomado una sulfamida?

¿Qué tienen en común con ese niño que tiene la pielcita seca y escamosa como de pescado, lastimada de tanto rascarse en algunas zonas del cuerpo?

la alergia y usted

Tienen en común que un grupo de células de sus organismos, que son como globitos cargados de una serie de productos químicos, están activados, células que se llaman basófilos cuando circulan por la sangre y mastocitos cuando están fijas a los tejidos, como las mucosas respiratorias, o las digestivas, o en la piel.

Y están activadas porque un tipo especial de anticuerpo, que existe en toda la población en cantidades muy pequeñas, pero que en estos pacientes se halla muchas veces más elevada, se une a las células y de esta unión más la presencia del elemento desencadenante específico como por ejemplo el polvo de las frazadas, o las frutillas, o las sulfamidas, pincha estas células globito, y las mismas vuelcan unos productos químicos que agrandan los vasos capilares y hacen que se hinchen los tejidos, se contraigan los músculos bronquiales y se produzca el asma, o aumentan la cantidad de mucosidad nasal, originando picazón de nariz, y tapando las fosas nasales hacen que el paciente estornude y no pueda pasar el aire por la nariz, es decir tenga rinitis. O liberada en la piel produzca picazón y ronchas, como la urticaria.

El anticuerpo que está especialmente elevado en las alergias es la llamada Inmunoglobulina E (IgE). Esta IgE, que tiene lugarcitos específicos donde ubicarse sobre la superficie de los basófilos o mastocitos (células de la alergia), es muy parecida a las Inmunoglobulinas que constituyen los anticuerpos que sirven para la defensa, y parece que naturalmente están orientadas en la lucha contra algunos de los parásitos, pero en un tipo de población determinada, en vez de dedicarse a atacar parásitos que no existen, se dedican a “perjudicar”a los pacientes que la producen.

Ya en la vida fetal, se fabrica IgE, y pueden detectarse cantidades anormalmente elevadas en la sangre del cordón del recién nacido, con lo cual se puede con cierto grado de seguridad, predecir que ha nacido un niño alérgico.

Esta IgE, como todo anticuerpo, actúa reconociendo sitios muy específicos de diversas moléculas que se ponen en su contacto. Lo curioso es que dichas moléculas no son infecciosas, es decir que no tienen la intención de agredir al organismo, y es por ello que quienes son normales, no alérgicos, no producen estos anticuerpos que podríamos llamar innecesarios. Así actúan contra moléculas de unos bichitos feos como piojos, habitantes de colchones, almohadas, sofás, y todo sitio con telas, papeles que no se limpien en forma debida y eficiente, así como alfombras, donde su vida se hace más fácil por lo difícil que es poder limpiarlas. Estos bichitos que son microscópicos ( no los podemos ver a simple vista), son los dermatofagoides.

También se pueden producir anticuerpos IgE contra diversos hongos existentes en sitios húmedos , mal soleados, llamados hongos ambientales, de los cuales se conocen varias familias. Estos hongos que podemos ver crecer en techos y paredes y especialmente en sótanos, son capaces de producir alergia.

La polinosis o fiebre de heno, fue la primera alergia clínica conocida y la más difundida, los diversos pólenes como por ejemplo de árboles (plátanos, tilos, álamos, olivos, etc.) o de pastos o de múltiples tipos de malezas, producen alergias “estacionales”, es decir que se presentan justamente en la época que florecen las plantas. Estas polinosis se presentan por pólenes que transmite el viento (anemófilos) y no se producen por aquellos pólenes de flores vistosas que son llevados por insectos.

De los diversos alimentos, los que habitualmente producen alergia son la leche de vaca, la clara de huevo, el chocolate, las nueces, el tomate, los pescados diversos, y algunas frutas.
Todos esto elementos contra los cuales pueden producir anticuerpos IgE los pacientes alérgicos, reciben el nombre de alergenos. Los anticuerpos son propios para cada unos de estos alergenos y cada paciente puede tenerlos contra uno o contra varios de los mismos.

De las células que hemos mencionado como “globitos” y que tienen sustancias químicas en su interior, algunas de ellas ya listas para volcar en los tejidos, como la Histamina, la más conocida de todas, la primera en salir y producir reacciones. Pero a medida que pasan las horas estos globitos fabrican otros productos químicos como los Leucotrienes, que tienen acciones parecidas pero más prolongadas y fuertes que la Histamina, y otros que tienen la capacidad de atraer como imanes a otros grupos de células, las que al llegar complican las cosas y producen lo que llamamos la inflamación alérgica. Esta inflamación es más seria para el paciente porque
mantiene la enfermedad y puede agravar su curso.

Existe una forma de reacción alérgica, muy fuerte, generalmente producida por la inyección de algún medicamento o por la picadura de insectos, que es el llamado shock anafiláctico, donde muchos de estos globitos se rompen al mismo tiempo, y es tal la cantidad de histamina que se libera que puede poner en peligro la vida del paciente.

Existe otro tipo de reacción alérgica diferente, que no es mediada por la IgE, sino que lo determinan directamente un grupo de células llamadas linfocitos. Estos linfocitos, en la piel pueden reconocer determinadas composiciones químicas o determinados metales, produciendo el llamado eczema de contacto que es el que pueden presentar algunas mujeres ante el uso de algunos cosméticos, poniéndoseles la cara colorada, con picazón y aparición de unas gotitas de serosidad (como agua) justo el día que tienen una fiesta, o en algunos trabajadores expuestos a productos cromados o del caucho, etc.

Dr. Leonardo Greiding

Su Alergólogo le puede dar mas información

Compartir esto: